Descubre con nosotros qué ver en Logroño. La capital de la Rioja es una ciudad dinámica, interesantes y muy sorprendente.
Mencionar Logroño es abrir inmediatamente nuestro paladar al famoso vino de la Rioja y a las tapas.
Sin embargo, además de tener una enorme gastronomía, se pueden encontrar muchísimas más cosas que ver en Logroño, capital de la interesante provincia de La Rioja.
Y es que la ciudad forma parte del camino de Santiago Francés, es uno de los mejores sitios para vivir en España y se ubica en la región más vitivinícola de este país.
Hemos visitado esta cosmopolita ciudad tras visitar la Rioja Alavesa y nos ha sorprendido su amalgama entre lo tradicional, medieval y contemporáneo.
Para que no te olvides de conocer los mejores lugares, te dejamos nuestras recomendaciones de qué ver en Logroño, aunque siempre faltará tiempo para descubrir más.
Free tour y Visita Guiada por Logroño
Antes de nada, como siempre hacemos, os recomendamos empezar a descubrir esta ciudad de la mano de un guía experto.
El ver las cosa y que nos las cuenten dan un plus añadido a cualquier localidad y Logroño no es una excepción.
En este caso, la visita guiada más contratada es un free tour por el casco antiguo de Logroño, que en unas 2 horas nos lleva por la mayoría de imprescindibles de la ciudad.
Si vamos en grupo, otra opción que está muy bien es un tour privado por las calles de Logroño.
Qué ver en Logroño, los imprescindibles
La capital de la Rioja se encuentra al norte del país y al sur de Bilbao. Durante siglos, ha sido una de las paradas indispensables del Camino jacobeo y en sus calles puedes encontrar numerosos peregrinos, lo que da un toque particular e internacional a la ciudad.
1. Muralla de Revellín
Tu visita se puede iniciar por el tramo mejor conservado de la antigua muralla medieval, la de Revellín. Antiguamente, Logroño estaba amurallada y en este sitio puedes apreciar los restos de las fortificaciones hechas durante el siglo XVI y la entrada de Carlos I.
En la construcción destacan el Cubo del Revellín (1522-1524), un cubo artillero o torreón ubicado en la esquina noroccidental del recinto que nos da idea de la sólida fortificación que tenía la ciudad.
También encontramos aquí la Puerta del Camino, la única entrada original que aún se conserva y en la que puedes contemplar el águila bicéfala de Carlos I de España junto a dos escudos de Logroño con las tres flores de lis otorgadas por el rey a la ciudad, como agradecimiento por la defensa del asedio contra las tropas francesas en 1521.
2. Concatedral de Santa María de la Redonda
Es un templo con rango de iglesia catedral que fue elevado a esta categoría en 1959 por el papa Paulo VI.
Se ubica en el corazón de la zona antigua logroñesa y sus orígenes datan desde 1453, cuando se levantó una primitiva iglesia románica circular, de ahí su nombre.
Detrás del altar mayor se observa la girola compuesta por tres capillas y al frente, en el trasaltar, se puede admirar una hornacina de cristal con un lienzo pequeño de la Crucifixión adjudicado a Miguel Ángel.
En la actualidad, destaca su fachada con imaginería de alabastro y dos torres barrocas, a las que se conoce popularmente como torres gemelas. La del lado norte conocida como “Torre de San Pedro” es ligeramente menor que la de la cara sur “Torre de San Pablo”.
Una verdadera obra artística, resultado de diferentes siglos y cuya monumentalidad, típica de los campanarios barrocos riojanos, realmente te sorprenderá.
3. El Casco antiguo
Este sitio supone el encanto de las calles a partir de las que ha ido creciendo Logroño y desde las que se forma su historia.
Después de conocer la Concatedral puedes llegar a la Plaza del Mercado y dirigirte a la Iglesia de San Bartolomé, el templo gótico más antiguo de Logroño (siglo XIII) donde puedes apreciar la magnificencia de la portada ojival.
El siguiente punto en el recorrido es la Calle Ruavieja, adoquinada hermosamente y que conforma parte del Camino de Santiago.
Mucha de su fama también son los calados, las bodegas de vino que se construían bajo las casas para preservarlo de la luz y temperatura. Uno de los calados más antiguos es el de la casa de San Gregorio, del siglo XVI, y el del palacio de los Yanguas, actualmente “Centro de la Cultura de La Rioja”.
4. Puente de piedra
Otra de laos imprescindibles que hacer en Logroño es caminar los 198 metros que conforman el puente más emblemático de la ciudad, el Puente de Piedra.
Su verdadero nombre es Puente de San Juan de Ortega, en recuerdo de una capilla que había en la orilla del Ebro.
En nuestros días, caminas por una obra del siglo XIX (1884) porque el original, construido en el siglo XII, sufrió un derrumbe. Es el punto de entrada del Camino de Santiago y uno de los símbolos de la ciudad, pues aparece representado en su escudo.
Recuerda tomar muchas fotos con las torres gemelas de la Concatedral al fondo y vistas sobre el río, ¡quedarán increíbles!
5. La Plaza y el Paseo del Espolón
La plaza del Espolón es la más emblemática de la ciudad. Comenzó a configurarse en 1757 como paseo público fuera de las murallas que protegían la ciudad.
En el centro de la plaza, que es donde empiezan la mayoría de visitas guiadas por Logroño, tenemos una estatua ecuestre del general Espartero.
6. Calle Portales
Es la calle más comercial en la ciudad y debe su nombre a los soportes (portales) que se encuentran en ella.
Su encanto radica en el montón de locales comerciales antiguos que se encuentran aquí; puedes encontrar desde terrazas para refrescarte y cargarte deliciosamente de energía hasta confiterías con más de 100 años, como “La Mariposa de oro”.
Es la vía principal del Casco Antiguo y el lugar ideal para descansar mientras observas el traqueteo de los transeúntes.
7. Parque del Ebro
Después de comer, una buena idea es volver a cruzar el Puente de Piedra, andar a la orilla del Ebro, llegar a su Parque y caminar relajadamente en él.
Respira el aire en el pulmón de la ciudad, una amplia arboleda con sauces, chopos y pinos. También puedes encontrar puntos de interés como los Molinos, la Pasarela y la Puerta del Ebro, la Chimenea de ladrillo y el Frontón del Revellín.
De regreso al centro, te recomendamos cruzar el Ebro por el Puente de Hierro o de Sagasta, una construcción de 1881 hecha por la compañía ferroviaria “Maquinista Terrestre y Marítima de Barcelona”.
Su estilo te recordará inmediatamente la elegancia del siglo XIX, como la torre Eiffel o el Puente Bizkaia.
8. Plaza de Santiago
Si continúas la Calle Sagasta llegarás a la Plaza de Santiago, donde se ubica la Iglesia de Santiago el Real, y sí, este lugar es una parada obligatoria y clave en el peregrinar del Camino de Santiago.
Es una de las más antiguas de la ciudad, su construcción data entre los años 1513 y 1527, y según algunos historiadores, sus cimientos están sobre un templo romano.
Es un edificio estilo barroco que en su interior alberga a la Virgen de la Esperanza, la patrona de Logroño, y a la cripta de los condenados, un lugar con enterramientos.
En la misma plaza es posible admirar otros sitios como:
- La Fuente del Peregrino, una reminiscencia de 1675 o más atrás y que abastecía de agua a los peregrinos.
- El enorme Juego de la Oca que muestra en sus casillas las paradas al Camino de Santiago Francés.
- El Café Moderno, uno de los sitios distintivos con más de 100 años de antigüedad y donde los bocadillos de calamar son exquisitos.
9. Calle Laurel
Y si de comer se trata, nada como ir a la Calle Laurel, el lugar que es sinónimo de tapas o pinchos en la capital riojana. También se conoce esta calle como la “Ruta de los Elefantes” porque entre tanto bar, muchos salen de “trompa” y a cuatro patas.
En alrededor de 100 metros podrás disfrutar de una enorme oferta gastronómica para todas las preferencias y a bajo costo.
Uno de nuestros platillos favoritos son los legendarios champiñones del bar Soriano, pero es difícil decidir entre “Tío Agus” de Lorenzo o el “Matrimonio” de Blanco y Negro. Las opciones son muchas y van desde las tradicionales hasta innovaciones totalmente originales.
Si lo visitas un jueves no festivo, puedes aprovechar grandes promociones, algo así como dos euros por un pincho y un chato de vino.
10. Mercado San Blas
Si eres como nosotros, que siempre andamos buscando productos auténticos en los mercados típicos, el mercado de abastos o San Blas te encantará. Además de las verduras, frutas y hortalizas frescas, encontrarás riquísimos salchichones, quesos y espectaculares morcillas.
Lo encuentras a la entrada de la Calle Laurel y es famoso por sus embutidos y productos locales. El mejor souvenir que puedes llevar de tu visita por estos lares.
11. Arte urbano en Logroño
Aunque tuvimos poco tiempo, una de las cosas que más nos gusta hacer en hacer en las ciudades que visitamos en callejear.
En Logroño nos sorprendieron varios murales situados muy cerca unos de otros. ¡Muy cool!
Bodegas de vinos de Logroño
No necesitas ser enólogo para disfrutar un buen vino, y lo mejor para ello es descubrir una bodega con catas guiadas en Logroño.
Algunas están tan cerca que puedes llegar caminando y además de saborear vinos de La Rioja, puedes conocer sus procesos de elaboración y, por supuesto, comprar algunas botellas. Algunas de nuestras recomendaciones son:
- Bodegas Franco Españolas, a solo 10 minutos andando del Centro Histórico.
- Bodegas Villa Ijalba a únicamente 15 minutos caminando del Puente de Piedra.
- Bodegas Márquez de Cáceres, un clásico reconocido por generaciones.
- Bodegas Campillo, a 6 km de la ciudad, te ofrecen excelente vino, agradables instalaciones y la posibilidad de conocer un pueblito pintoresco.
- Bodegas Ontañón, el “Templo del Vino” con más de 30 años de tradición.
- Bodegas Rioja Vega, con más de 130 años de historia, te seducirán los aromas, sabor y apariencia de sus magníficos vinos.
Otra alternativa es contratar un tour que incluya degustación de vino y transporte a diferentes bodegas para pasar un día inolvidable y “feliz”.
Por ejemplo, tenemos las visita a las Bodegas Riojanas situadas en la localidad de Cenicero.
Para muchas personas vivir es viajar y conocer, por lo que en Logroño hay mucho que ver, gustar y sentir. ¡No lo dejes para después, añade este mágico sitio en tu lista de lugares a visitar y vívelo!
Dónde dormir en Logroño
En nuestro caso Logroño fue una ciudad que visitamos en ruta. La noche anterior la pasamos en Vitoria y ese día nuestro destino final era Zaragoza.
No obstante, os hemos mirado algunas opciones que por precio, situación y valoraciones, tienen buena pinta para pasar una o dos noches en Logroño:
- Sercotel Calle Mayor
- Eurostars Fuerte Ruavieja
- Hotel los Bracos by Silken, opción barata por unos 60€/noche
Qué ver cerca de Logroño
Logroño es una ciudad que podemos visitar perfectamente en un fin de semana, destinando un día a lo que es la localidad y otro a sus alrededores.
Nosotros de la zona conocemos básicamente la Rioja Alavesa. De grandes ciudades, muy lejos encontramos Zaragoza y Vitoria.
- Laguardia a 18 km
- Elciego a 23 km
- Labastida a 38 km
- Samaniego a 27 km
- Vitoria a 63 km
- Pamplona a 85 km
- Bilbao a 136 km
- Zaragoza a 170 km
Esperamos que os sea de utilidad nuestro post sobre qué ver en Logroño. Os animamos a seguir leyendo más sobre esta ciudad y alrededores en nuestro blog de viajes.
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