Lo mejor qué ver en Mongolia, un país donde los paisajes son los grandes protagonistas. Ulán Bator, pueblos, parques naturales, desiertos y mucho más.
Mongolia es un país único en el mundo. Con solo 3,5 millones de habitantes es un país que es el triple de grande que el nuestro, ofreciéndonos unos paisajes y rutas espectaculares, en los que perdernos en largas jornadas de turismo.
Nosotros viajamos en septiembre de 2023 ya que nos invitaron a una boda en Ulan Bator, de una buena amiga de Judit. No es el viaje que hubiéramos elegido para hacer con un bebé de apenas 2 años, pero no dudamos en aprovechar la oportunidad para descubrir durante 10 días el páis.
La verdad es que este tiempo es muy justo y solo da para hacernos una idea de lo que tiene Mongolia para ofrecernos. Allí las distancias son muy grandes y el estado de las carreteras pésimo, por lo que para movernos de un punto a otro son necesarias bastantes horas en la carretera.
También se ha de tener en cuenta que los grandes alicientes naturales del país, animan a pasar largas jornadas de trekking o senderismo, por lo que si queremos disfrutar de verdad de Mongolia, lo mejor es tener tiempo suficiente y estar bien físicamente.
Dicho esto, os dejamos con los grandes imprescindibles qué ver en Mongolia, de los cuales nos quedamos con las ganas de disfrutar y vivir varios de ellos.
1. Ulán Bator, la capital más fría del mundo
Lo más probable es que vuestro viaje por Mongolia empiece en Ulán Bator (Ulaanbaatar), la capital del país, que tiene el mérito de ser la capital más fría del mundo, alcanzando los -30ºC en los días gélidos de invierno.
Esta ciudad, con cerca de 1,5 millones de habitantes, acoge a casi la mitad de la población del país. A primera vista parece una gran urbe, bastante contaminada y antigua, con aires a los años 80 de la Europa Comunista, pero si nos adentramos en ella, conseguimos ver destellos que hacen más que interesante pasar un par de días por sus calles.
Entre los imprescindibles qué ver en Ulan Bator, de los que os hemos dejado un artículo detallandolos, tenemos la Plaza Sükhbaatar, que es la plaza principal de la ciudad, el Palacio de Invierno de Bogd Khan y el Monasterio de Gandantegchinlin.
Para alojarnos, nosotros lo hicimos en el The Blue Sky Hotel and Tower, que es uno de los edificios más emblemáticos y llamativos de la ciudad. Es fácil de distinguir ya que tiene forma de vela como el Hotel W de Barcelona.
2. La estatua ecuestre de Gengis Kan, un coloso qué ver en Mongolia
La estatua ecuestre de Gengis Kan es una gran estatua, que no puede faltar en ningún viaje a Mongolia.
La estatua está situada en la ribera del río Tuul, en Tsonjin Boldog, a unos 54 km al este de Ulán Bator. Según la leyenda, este es el lugar donde Gengis Kan encontró un látigo de oro.
Al estar tan cerca de la capital, es muy habitual hacer una escapada desde la misma de un día o mañana o visitarla como primera parada en una ruta por el país.
Estamos ante la estatua ecuestre más grande del mundo. Mide más de 40 metros y está realizada con un brillante acero inoxidable. En su interior hay un pequeño museo y mirador, en el que podemos subir a casi la altura de la cabeza.
3. Terelj, nuestra primera parada en Mongolia
Terelj es uno de los parques nacionales más visitados de Mongolia. Situado a tan solo 80 km de Ulán Bator, es lugar de escape para muchos habitantes de la capital que huyen de la polución.
Este lugar nos lleva a lo que es Mongolia, con paisajes, que incluyen formaciones rocosas únicas y vastas estepas verdes. Aquí vimos por primera vez los típicos “gers” que son las casas tradicionales donde viven las familias nómadas de Mongolia.
Entre los lugares que no nos podemos perder en Terelj, tenemos:
- la roca de la tortuga, una formación rocosa natural que tiene la forma de una tortuga gigante. Según la leyenda, esta roca protege al parque nacional de los desastres naturales
- el monasterio de Aryabal, un templo budista ubicado en una colina. Para llegar al monasterio, hay que subir por una escalera de 108 peldaños, que simbolizan los 108 obstáculos que hay que superar para alcanzar la iluminación.
En Terelj nos alojamos por primera vez en un ger. Fue en el Terelj Star Resort, lugar donde se celebró el baile y fiesta de la boda a la que acudimos.
4. Hustai National Park, la tierra de los caballos salvajes en Mongolia
Hustai National Park es otro de los parques nacionales de Mongolia, ubicado relativamente cerca de la capital.
Es famoso por albergar a los takhi, los caballos salvajes mongoles que estuvieron al borde de la extinción y que fueron reintroducidos en la zona en 1992.
El parque está atravesado por el río Tuul y su paisaje es una combinación de estepa, bosque y montaña. Aquí es el mejor lugar de todo Mongolia para montar a caballo.
Lógicamente, la opción de dormir en un ger, está disponible y es casi la única que hay para los turistas que se acercan hasta aquí.
5. Kharkhorin, la antigua capital del imperio mongol
Kharkhorin es otra de las ciudades imprescindibles en cualquier ruta por Mongolia. Esta urbe, de algo más de 15.000 habitantes, se encuentra cerca de las ruinas de la antigua ciudad de Karakorum, que fue la capital del Imperio Mongol entre 1235 y 1260 y de la dinastía Yuan del Norte en los siglos XIV y XV.
Karakorum fue fundada por Gengis Kan en 1220 y fue el centro político, religioso y cultural de los mongoles. Allí se construyó el palacio de Tumen Amgalan, la estatua de plata del árbol sagrado, el observatorio astronómico y varios templos budistas, taoístas, cristianos y musulmanes. Por desgracia, de todo esto bien poco queda, ya que el imperio chino se encargo de destruir todo resto del apogeo del enemigo mongol.
Aquí tambiñen se encuentra el monasterio de Erdene Zuu, que es el monasterio budista más antiguo que se conserva en Mongolia, fundado en 1585 por Abtai Sain Kan, el primer líder religioso del budismo tibetano en Mongolia.
El monasterio está rodeado por una muralla con 108 estupas y contiene tres templos principales dedicados a Buda, Avalokiteshvara y Zanabazar, el primer Bogd Gegen o líder supremo del budismo mongol.
Aunque a nosotros nos pilló la lluvia visitando este lugar, hemos de decir que merece mucho la pena.
Si tenéis tiempo, no es mala opción visitar el museo de Karakorum, para conocer algo más del pasado glorioso de esta ciudad.
Nuestro alojamiento fue el Secret of the Silk Road, una auténtica pasada.
6. Valle de Orkhon, patrimonio de la Humanidad
El Valle de Orkhon, zona dónde se ubica Kharkhorin, es otra de las ubicaciones relativamente cercanas a Ulán Bator que no pueden faltar en nuestra ruta de imprescindibles qué ver en Mongolia.
Fue inscrito en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2004 debido a su paisaje cultural que muestra la evolución de las tradiciones nómadas en la estepa centroasiática a lo largo de varios milenios.
Monasterio de Tuvkhun
Aquí encontramos uno de los templos más espectaculares de Mongolia, el Monasterio de Tuvkhun, fundado en 1648 por Zanabazar, el primer Jebtsundamba Khutuktu, líder espiritual del budismo tibetano en Mongolia.
El Monasterio de Tuvkhun se ubica en lo alto de unoa colina y se compone de varias cuevas y capillas que albergan estatuas, pinturas y objetos sagrados del budismo.
Cataratas del Valle de Orkhon o Ulaan Tsutgalan
Las Cataratas del Valle de Orkhon son un espectáculo natural que se encuentra en el centro de Mongolia, cerca del río Orkhon.
Se formaron hace unos 20.000 años por la actividad volcánica que endureció la lava y creó esta cascada
Las cataratas son particularmente impresionantes durante el verano después de fuertes lluvias, cuando el flujo de agua es más abundante. Sin embargo, en invierno, el paisaje se transforma cuando las cataratas se congelan, ofreciendo una visita inigualable
Khar Balgas
Khar Balgas, que significa “ruinas negras” en mongol, es el nombre de las ruinas de la antigua capital del primer Imperio Uigur, que se estableció en el siglo VIII sobre el sitio de la antigua capital de los Göktürk.
Estamos ante lo que una ciudad fortificada y un centro comercial y religioso que floreció hasta el año 840, cuando fue destruida por los invasores kirguises.
Entre los restos que se pueden ver en el sitio se encuentran las murallas, los templos, los palacios, las estelas con inscripciones rúnicas y un monumento con una estatua de un dragón que glorifica a los khaganes uigures.
7. Desierto del Gobi
Uno de los grandes reclamos turísticos qué ver en Mongolia es el Desierto del Gobi, que nosotros no llegamos a visitar ya que entendimos que no es el mejor plan que podemos hacer con un bebé.
Este desierto es una de las regiones desérticas más grandes e importantes del mundo, que se extiende entre el norte de China y el sur de Mongolia. Está formado por diferentes zonas geográficas y ecológicas, que incluyen estepas, mesetas, montañas, dunas y lagos salados.
Para visitar relativamente bien el Desierto del Gobi haría falta una semana con largos trayectos en 4×4 para poder experimentar en primera persona los secretos de este lugar.
La verdad es que puede ser un viaje bastante duro donde la monotonía y las horas en el coche pueden llegar a cansar.
Parque nacional de Gobi Gurvansaiján
Es dificil destacar algún lugar de este desierto, pero si vamos a la aventura no puede faltar el llegar al Parque nacional de Gobi Gurvansaiján.
Dentro del parque se encuentran las impresionantes dunas de Khongoryn Els, que pueden alcanzar los 300 metros de altura y producen un sonido silbante cuando el viento las mueve.
La cuenca del Nemegt
Otro lugar interesante qué ver en Mongolia ubicado en el Desierto del Gobi es La cuenca del Nemegt.
Se trata de una zona de fósiles de dinosaurios y otros animales prehistóricos, como el velociraptor, el protoceratops, el oviraptor y el tarbosaurio. También se han encontrado huevos de dinosaurio y herramientas de piedra de los primeros humanos.
8. Khövsgöl Nuur, el lago que enamora a los visitantes de Mongolia
Si el desierto del Gobi es el protagonista en el sur de Mongolia, en la zona norte tenemos el lago Khövsgöl Nuur, de 136 km de largo y que como curiosidad alberga casi el 2% del agua potable que hay en el mundo.
Para los mongoles se trata de un lugar muy espiritual, ya que este es hogar de los nagas (espíritus del agua) y fuente de inspiración para los chamanes que hoy en día aún habitan el lugar.
Para los turistas Khövsgöl Nuur es sinónimo de actividades al aire libre como trekking, paseos a caballo, actividades acuáticas y disfrutar de la naturaleza. Para los más osados, y viajeros con más tiempo, hay una propuesta de ruta, de unas 2 semanas de duración, que da la vuelta andando al lago.
9. Monasterio de Amarbayasgalant Khiid, en el Valle Irvem
De casi impronunciable nombre para nosotros, sin movernos del norte del país, encontramos el Monasterio de Amarbayasgalant Khiid.
Este monasterio fue construido entre 1727 y 1736 por orden del emperador Kangxi de la dinastía Qing, en honor al primer Bogd Gegen (líder espiritual) de Mongolia, Zanabazar, cuyos restos se encuentran allí.
El monasterio es un ejemplo de la arquitectura budista tibetana, con influencias chinas y mongoles. Tiene 28 templos y alberga unas 6.000 estatuas, pinturas y objetos sagrados. El monasterio fue parcialmente destruido durante las purgas comunistas de los años 30 del siglo XX, pero fue restaurado en los años 90 con la ayuda de la UNESCO.
10. Bayan-Ölgii y la caza con águilas
Bayan-Ölgii es una provincia de Mongolia que se encuentra en el extremo occidental del país, cerca de las fronteras con Rusia y China, por este motivo hace falta bastante tiempo y paciencia para llegar hasta allí teniendo en cuenta el estado de las carreteras del país.
Como curiosidad es la única provincia del país donde la mayoría de la población es de etnia kazaja, que conserva su cultura, idioma y religión (el islam).
Una de las tradiciones más famosas y antiguas de los kazajos de Bayan-Ölgii es la caza con águilas, una forma de cetrería que se practica desde hace siglos en la estepa euroasiática.
Cada año, en octubre, se celebra el Festival del Águila de Oro en Bayan-Ölgii. Este evento reúne a Berkutchis de toda la región para competir y demostrar las habilidades de caza de sus águilas. Además de la competencia de caza, el festival también cuenta con eventos tradicionales kazajos, como carreras de caballos, lucha y danzas.
11. Parque Nacional Altai Tavan Bogd
El Parque Nacional Altai Tavan Bogd se encuentra en Bayan-Ölgii, en el extremo occidental de Mongolia. Su nombre hace referencia a los “Cinco Santos de Altai” y abarca la sección mongola del conjunto montañoso de Tavan Bogd, situado en la confluencia de tres fronteras: Mongolia, Rusia y China.
En su interior, destacan los lagos Jotón, Khurgan y Dayan y varios sitios arqueológicos, destacanto, los complejos petroglíficos del Altái de Mongolia, que son reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Otras experiencias únicas que podemos hacer en Mongolia
Aparte de los imprescindibles qué ver en Mongolia que os hemos comentado, en este país podemos vivir varias experiencias únicas, accesibles en la mayoría de puntos turísticos que hay.
Viajar en el Transmongoliano
Aparte del avión, otra forma de llegar a Mongolia es en el Transmogoliano, tren que conecta China y Rusia, pasando por Mongolia y siguiendo la antigua ruta del té y los caballos.
El recorrido tiene una longitud de 7.621 km y dura unos siete días sin parar, aunque lo mejor es ir descubriendo los mágicos lugares en los que tiene parada el ferrocarril.
Festival Naadam
Uno de los grandes eventos de Mongolia es El Festival Naadam. Se trata de es una fiesta tradicional que se celebra en tanto en la propia Mongolia, Mongolia Interior y la República de Tuva.
El festival se llama también “eriin gurvan naadam”, que significa “los tres juegos de hombres”. Estos juegos son la lucha mongola, las carreras de caballos y el tiro con arco, y se realizan por todo el país durante el verano.
En 2010, el Festival Naadam fue inscrito en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
El mayor festival Naadam del país tiene lugar en la capital mongola, Ulán Bator, durante la Fiesta Nacional el 15 de julio y en el Estadio Nacional de Mongolia.
Dormir en un Ger o Yurta
Una de las cosas más sorprendentes de Mongolia es ver la gran cantidad de familias nómadas que hay y que viven casi en el medio de la nada en una especia de tiendas denominadas gers (o yurtas en castellano).
Una de las experiencias que seguro que viviremos en el país es alojarnos en uno de estos típicos alojamientos. Lo más habitual es hacerlo en un tourist camp, que son especies de pequeños resort que tienen sus gers turísticos muy bien preparados, incluso algunos con baño propio.
Para los más aventureros y que busquen una experiencia más auténtica, hay la posibilidad de alojarse en gers de familias nómadas, donde se podemos vivir durante unas horas como unos auténticos nómadas.
Visitar una familia nómada
Aparte de poder dormir en un ger, otra de las actividades habituales en cualquier ruta por Mongolia es ir a visitar una familia o campamento nómada.
Los primero son más auténticos ya que son familias que viven de esta forma y nos permiten entrar en casas. Los campamentos son más un espectáculo para turistas, con los pros y contras que esto tiene.
Probar la gastronomía de Mongolia
Al viajar con un bebé, uno de los grandes problemas que intuiamos de Mongolia, era que demonios comeríamos.
La verdad es que nada más lejos de la realidad. En todos los sitios encontramos varios platos que estaban buenísimos a base de pollo, cordero y otras carnes.
Moverte por el país en un “golovastik”
Aunque lo más cómodo para moverte por Mongolia es un 4×4, no podemos obviar que aquí encontramos uno de los medios de transporte más curiosos del mundo, el “golovastik” que es un apodo popular para el UAZ-452, una furgoneta todoterreno producida por la empresa rusa UAZ.
El nombre se debe a que su forma recuerda a la de un renacuajo. Este vehículo es muy utilizado en el país, donde se le conoce también como “bukhanka” (hogaza de pan) o “tabletka”.
Entre las ventajas de este medio de transporte, motivos sentimentales aparte, está su gran capacidad de carga, tracción 4×4 y robustez. Entre sus inconvenientes estará el confort, velocidad y gran consumo que tiene.
A tener en cuenta a la hora de visitar Mongolia
Mongolia es uno de estos viajes que merece la pena prepararlo con detalle para seleccionar los lugares que queremos visitar. También es básico ir en una época del año donde las temperaturas no sean prohibitivas, ya que es fácil que en invierno se llegue a lo -30ºC.
Tiempo Mongolia
Mongolia es un país con un clima continental extremo. Esto significa a grandes rasgos, inviernos fríos y veranos cálidos, con grandes variaciones diurnas de temperatura y variaciones estacionales muy marcadas.
Como resumen general del clima de Mongolia podríamos decir:
- Invierno (noviembre a febrero): Estos meses son fríos con temperaturas que frecuentemente caen por debajo de -20°C en la capital, Ulán Bator, y pueden alcanzar incluso -40°C en algunas regiones. Las nevadas pueden ser ligeras o moderadas, pero debido al frío extremo, la nieve tiende a permanecer en el suelo durante mucho tiempo.
- Primavera (marzo a mayo): Es un período de transición, y a menudo se asocia con fuertes vientos y tormentas de arena en algunas partes del país. Las temperaturas comienzan a subir lentamente, aunque todavía puede haber heladas nocturnas.
- Verano (junio a agosto): Es la temporada más cálida y la más adecuada para visitar. Las temperaturas pueden oscilar entre 20°C y 30°C. También es la temporada de lluvias, especialmente en julio y agosto, aunque Mongolia es generalmente seca.
- Otoño (septiembre a octubre): Es una temporada corta con temperaturas descendiendo rápidamente. El paisaje se vuelve dorado a medida que las hierbas y los árboles cambian de color, ofreciendo vistas espectaculares.
Ulán Bator, la capital, tiene el título no oficial de ser la capital más fría del mundo debido a sus fríos inviernos. Aunque los veranos pueden ser cálidos, las temperaturas nocturnas a menudo bajan, haciendo que las noches sean frescas.
Moneda de Mongolia
La moneda oficial de Mongolia es el Tugrik, a menudo abreviado como ₮ o MNT (sigla para Mongolian Tögrög). Es una moneda con un valor muy bajo (1€ = 3700 MNT), por lo que todo en Mongolia vale decenas de miles de su moneda.
Contad que exceptuando la capital, solo se puede pagar en efectivo en las tiendas y restaurantes, por lo que es conveniente cambiar moneda en la ciudad o sacar dinero en un cajero automático. Nosotros cambiamos en la recepción del hotel, que tenía un cambio correcto y era lo más cómodo.
Viaje a Mongolia
Desde España no hay vuelo directo hasta Mongolia. Por lo que vimos nosotros, la única compañía que nos daba la opción de hacer vuelo conectado era Turkish Airlines via Estambul (1.000€ por persona),
Nosotros optamos por volar hasta Frankfurt (150€), pasar allí un par de días y coger un vuelo de Mongolia Airlines (600€) hasta Ulán Bator.
Tener Internet en Mongolia
Para tener Internet en Mongola la opción que elegimos fue la tarjet esim de Holafly que justo lanzaba la modalidad de datos ilimitados.
Sin lugar a duda la opción más cómoda para estar conectados durante todo el viaje. De todos modos, tened en cuenta que hay zonas donde no hay cobertura.
Seguro de viaje
Para viajar a Mongolia es básico contratar un buen seguro de viaje. Nosotros, como lo venimos haciendo de forma habitual, viajamos con Mondo,
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Visado Mongolia
En caso de tener pasaporte español, gracias a una exención que es vigente desde enero de 2023, no necesitamos visado para viajar a Mongolia, si viajamos menos de 30 días y lo hacemos por turismo.
De todos modos, lo mejor es mirar siempre fuentes oficiales no sea que cambie el tema. Os dejamos el enlace del Ministerio de Asuntos Exteriores con su información sobre viajar a Mongolia en diversos aspectos.
Cómo moverte por Mongolia
Si no vamos en grupo en nuestro viaje por Mongolia, lo más habitual es coger un coche con conductor y guía. Os recomendamos 100% que el coche sea 4×4 ya que vuestras cervicales lo agradeceran.
Mapa qué ver en Mongolia
Os dejamos con el mapa interactivo con todo lo qué ver en Mongolia. Aquí contad que aparte de que las distancias son muy grandes, la velocidad promedio de los desplazamientos no tiene nada que ver con lo que estamos acostumbrados en Europa.
Esperamos que os sea de utilidad nuestro post sobre Qué ver en Mongolia. Os animamos a seguir leyendo más de este destino en nuestro blog de viajes.
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